Los Caños de Carmona
abastecieron de agua durante siglos a la ciudad. Su nombre proviene del
lugar donde vertían sus aguas, la Puerta de Carmona, una de los
principales accesos a la ciudad hasta que fue derriba en 1868. Sin
embargo, el acueducto no partía de la localidad de los Alcores, sino del
embalse de Santa Lucía, en Alcalá de Guadaíra. Desde allí recorría 17
kilómetros hasta llegar a Sevilla, atravesando varias galerías
subterráneas excavadas o construidas en la roca para posteriormente
salir a cielo abierto, transformándose en un acueducto aéreo compuesto
por una sucesión de arcadas.
A pesar de su origen romano, el acueducto que vemos hoy en día es una reconstrucción de época almohade hecha en ladrillo
y que, seguramente, vino a sustituir a la maltrecha obra de ingeniería
romana. El agua era distribuida en la ciudad a unos pocos privilegiados
que tenían garantizado el suministro particular, el resto de la
población tenía que acudir a las fuentes públicas para recogerla. Con el
paso de los siglos el acueducto tuvo que ser reparado en innumerables
ocasiones, su continuo deterioro sumado a los enganches ilegales,
hicieron que llegara en muy malas condiciones al siglo XIX. Es por ello
que a principios del siglo XX empezó el derribo de algunos tramos con la
excusa de favorecer el crecimiento de la ciudad, algo similar a lo que
había ocurrido con las murallas.
A día de hoy se conservan tres tramos principales dentro de la ciudad,
todos ellos en los alrededores de la actual avenida Luis Montoto
(imagen principal). El primer tramo nos lo encontramos muy cerca de la
Ronda Histórica, un conjunto de arcadas que se salvaron de la piqueta
porque durante años sirvieron de sustento al puente que cruzaba las vías
del tren que llegaban a la cercana estación de San Bernardo. El
siguiente tramo está en plena avenida de Luis Montoto y ha sido recientemente restaurado.
Y por último llegamos al último tramo del acueducto en suelo sevillano
(en Alcalá de Guadaíra se conservan las galerías que formaron parte del
mismo). Se encuentra en la barriada de Los Pajaritos, más allá de la
Avenida de Andalucía, centrando una pequeña plazoleta donde pasa
bastante desapercibido. Observando los tres tramos podemos ver los
desniveles del terreno ya que tanto éste como el más cercano a la Ronda
constan de un solo piso mientras que el de la Avenida Luis Montoto es
más espectacular, con un doble juego de arquerías en altura.